2 Corintios 1:3-5.Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación.
2 Corintios 1:3-5 |
¿podemos bendecir a nuestro Señor Jesucristo?
Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación. El cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación.
Damos apoyo al hermano o hermana que lo necesita a través de la oración y si es por necesidad económica pues también hay que dar el apoyo que necesita el prójimo. Pero la mas importante es la oración porque es la que mas Dios presta atención y toca los corazones para que bendigan a otros que lo necesitan.
¿Quien me consuela si no Dios?
por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios.
Está en nuestra vida como el aire que respiramos y como los colores que percibimos y vemos, así está su consuelo en nosotros. Jesús siempre está pendiente de cada uno de nosotros los seres humanos, por amor a nosotros fue que se entrego en el madero y fue cambiado de lugar por un ladrón
Está bonita la página
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